Parece que al humano, le cuesta comprender, que el Planeta no gira a su alrededor y menos todavÃa, que nunca tendrá la capacidad, información o inteligencia, como para poder controlar el entorno que nos rodea y en el que habitamos y desarrollamos las diferentes actividades, incluyendo la turÃstica.
Y esto lo estamos viendo, padeciendo y seguiremos observándolo durante años y siglos, como lleva ocurriendo, desde los orÃgenes de la humanidad. La evolución y cambios ambientales, por supuesto el climático, es parte esencial de los procesos de la Tierra, en los que el hombre puede intervenir pero de una forma relativa y desde luego con una reacción reciproca y en función del impacto producido al entorno.
Son las reglas del juego y o se conocen y se sabe jugar o nos quedamos fuera, sufriendo las consecuencias. Y si no piensen en los las de 1.000 millones de euros en pérdidas directas, por las cancelaciones de vuelos.
Como comentaba, los impactos son relativos y proporcionales a veces con los causados por la propia sociedad, pero otras veces, no guardan relación alguna, como el último caso del volcán de Islandia, que afecto al turismo mundial, porque el mercado emisor europeo, epicentro del mismo, es el más importante, por ahora.
Pero recuerden también, los recientes terremotos de China, HaitÃ, Chile,…Los tsunamis de Tailandia, Chile,….las diferentes tormentas, ciclones, huracanes, tornados, etc., que todos los años afectan a determinadas zonas ecuatoriales y tropicales, las sequias o desertizaciones, e incluso la propagación de virus, con potenciales pandemias, alergias, plagas, etc….en general cambios ambientales relativos, que afectan ya directamente a la actividad turÃstica. Pero, es estén seguros, que seguirán produciéndose y a muchos de ellos, el sector, solo podrá reaccionar, acorde a polÃticas estatales o supranacionales, mientras que la demanda lo sufrirá, como ahora en Europa, e ira de alguna forma seleccionando involuntariamente aquellas zonas de mayor vulnerabilidad, siendo su impacto mayor en función del impacto mediático, acontecido en cada suceso.
Porque es importante tener en cuenta, que un tema es el hecho del impacto fÃsico en un espacio y tiempo determinado, pero de éste deriva, las consecuencias emocionales y perceptuales, que en turismo tiene una mayor transcendencia.
Pero lo cierto es que el sector turÃstico, siempre ha vivido a espaldas del tema ambiental, considerándolo, en el mejor de los casos, el medio donde se desarrolla su actividad, como un jardÃn, al que hay que cuidar de vez en cuando, para tener buenas vistas y mejor todavÃa si son otros (Administraciones Públicas, dependiendo de los paÃses) los que se encargan de dicha función.
Es penoso, observar todavÃa la ignorancia técnica y por tanto económico-financiera, de no saber elegir el sitio adecuado, acorde a la vocación natural e incluso social del territorio objetivo, obligando no solo a inversiones sobrevaloradas, sino a una gestión posterior poco rentable y expuesta, innecesariamente  a factores ambientales adversos al proyecto.
La teorÃa de Darwin, ya nos enseño, que la mejor fórmula para sobrevivir es precisamente no ser más fuertes, sino saber adaptarse al medio y a sus cambios, ya que nunca se podrán controlar. Pero  con la información actual, si se pueden predecir determinados comportamientos y diseñar o planificar acorde a dicha información y escenarios posibles.
Y esto es lo que se denomina actuaciones glocales, es decir globales con aplicaciones locales y por tanto nace una faceta de conocimiento sobre Gestión de Crisis Ambientales en el Turismo.
Un cordial saludo
Arturo Crosby