La revista del Aeropuerto de Barcelona, editada por AENA, incluye en su número de diciembre una noticia titulada "Mejor atención a los usuarios en los filtros de seguridad".
Según informa dicha noticia, "el personal de vigilancia privada del aeropuerto ha asistido a un taller de habilidades sociales con el objetivo de mejorar la calidad del servicio ofrecido a los usuarios del aeropuerto a su paso por los filtros de seguridad".
El curso trataba aspectos como la comunicación, la negociación o la gestión de conflictos "e incluyó simulaciones de situaciones reales en las que el empleado, tras aprender las pautas de gestión, puede resolver la situación utilizando la empatÃa".
Lo cierto es que muchas de las personas que se ven obligadas a viajar con frecuencia han visto y vivido en sus propias carnes cómo los aeropuertos han ido perdiendo el glamour de antaño debido precisamente a los cada vez más molestos controles de seguridad, que hacen perder el tiempo y la paciencia de los pasajeros.
Y seguro que a todos nos vienen a la memoria anécdotas desagradables vividas en persona o presenciadas en directo...
Por ejemplo, en una ocasión, presencié cómo un viajero de negocios, harto de que los empleados de seguridad, con cierta arrogancia, le obligaran a descalzarse, a quitarse la chaqueta y a ser cacheado, les espetó: "¡Ya está bien, que no somos ganado!".
Bienvenida sea pues la iniciativa del Aeropuerto de Barcelona y ojalá que cursos de este tipo se lleven a cabo en más instalaciones. La aviación comercial lo necesita.
Me parece una buena iniciativa, y digna de ser copiada por muchos establecimientos hoteleros, especialmente cuando atienden entradas masivas de grupos.