Buenas,
Llevo apenas unas horas en Bogotá, aquí son las 7:22 de la mañana, y no puedo evitar darle vueltas a dos cosas que me han sucedido en las últimas horas y que pueden definir cuál es la filosofía de un destino turístico.
Jueves por la noche, en la T4 de Barajas. Salgo a la fila de taxis para coger uno en dirección al hotel en que pasaré la noche, para salir por la mañana hacia Colombia. Estoy un poco enfadada: en Menorca, los de IBERIA, sin preguntarme ni comentármelo, han decidido factuar mi maleta a destino final. Sin darme a mí la opción. O sea, que mi maleta espera en un almacén de Barajas al vuelo de mañana hacia Bogotá, mientras yo no tengo mi tarjeta de embarque y debo pasar la noche sin cepillo de dientes ni ropa para el viaje de mañana. Menos mal que no necesito, por ejemplo, picarme de insulina...
Sea como sea, salgo a coger un taxi. Me indican el que corresponde y entro. El taxista arranca y cuando le digo a dónde voy, me suelta, literalmente: "Me has jodido vivo". No es fácil que me quede sin palabras, pero os juro que me quedé planchada, sin reaccionar. Sigue: "Hay una parada arriba para trayectos cortos, me has jodido". Al cabo de unos laaaaaargos segundos, reacciono: "¿Una parada de taxis?". Primera noticia.
Por lo visto así es, no se han molestado en señalizarlo, claro, pero por lo visto han puesto una parada de taxis para recorridos cortos, como el mío. "Toda la tarde esperando para una carrera de 10 euros", insiste. "No lo sabía, lo siento", le digo sin tener muy claro si debo disculparme... "De todas formas, no está señalizado, así que imagino que será habitual que pase esto". Al final del trayecto me pide disculpas y reconoce que, efectivamente, la presunta parada para recorridos cortos no está señalizada.
Bogotá, ayer sobre las 6 de la tarde. Nos viene a buscar al aeropuerto un muchacho con el transfer del hotel. Nos cuenta las cosas maravillosas del AR Salitre, el hotel donde también se celebrará el seminario de COTELCO y la OMT el lunes y el martes. Se le ve orgulloso de trabajar allí. Es extremadamente amable y educado... lo primero que me sorprende al llegar a la capital de Colombia es que todo el mundo parece ser muy amable. Este muchacho, al final, nos dice: "De todas formas, todos los hoteles pueden tener hoy en día un buen spa o un buen restaurante... lo que importa y te diferencia es el servicio". Me quedo con la boca abierta. Estudia Turismo. Tendrá 20 años.
Efectivamente, amigo: lo que cuenta es el servicio, lo único que puede distinguir, al final, un buen producto de otro buen producto, un buen hotel de otro buen hotel. El servicio es mucho más que el producto, que la bonita escalera de mármol o el hall chill out... el servicio es la esencia del negocio turístico. Aquí, en Colombia, por lo visto es uno de los mantras de las escuelas de Turismo y de momento, parece que también de las empresas.
Seguiremos informando.
Así es Esther, lo que cuenta es el servicio, el problema es que a la mayoría se les olvida, y en España desde que dejo de ser un pais de emigrantes, y una importante parte de su población, consiguió una aceptable calidad de vida, empezaron a pensar que el servicio les degrada y rebaja su estatus, sin darse cuenta de que el espiritu de servicio a la sociedad en la que nos desarrollamos (no el servilismo), es una de las cosas que mas ennoblece al individuo.
Muy bueno e ilustrativo tu relato Esther, muchas gracias por compartirlo. Y espero que sigas teniendo una agradable estancia en esa linda tierra que es Colombia.
Y totalmente de acuerdo con tu comentario #1 de arriba, Miguel Ángel. Se puede decir más alto pero no más claro: en este país nuestro o nos ponemos las pilas con nuestra ACTITUD de servicio, con una actitud real, agradable, noble, natural y atenta, o muchos problemas seguiremos sembrando y cosechando! (Cuando además ¨se supone¨ que es nuestra industria principal, la de los servicios en sus más variadas formas...)
Cordiales saludos,
DSA
Madre mía Esther, me he quedado de piedra, si soy yo el taxista ahí se queda esperando una "mejor carrera", vaya tela...
Me encanta la frase del chico, porque estoy totalmente de acuerdo con la filosofía que desprende, es una verdad como un templo, pero no tan facil de ver hoy en día.
Un saludo.
Muchas gracias por vuestros comentarios! :)
Así es Miguel Ángel y Daniel... lo que me pareció más extraordinario es que lo tuviera claro ese estudiante de turismo y en cambio, tantas empresas y empresarios lo acepten y lo reconozcan pero sólo en teoría. Estoy de acuerdo con vosotros, hemos perdido algo sin duda en el camino, y me parece que tiene mucho que ver con la ausencia de pasión y de vocación. Siempre digo que el periodismo es más que una profesión, es casi una forma de vida. Y pienso que la industria de la hospitalidad (qué bonita y significativa palabra!) también debería serlo.
Javier...., me quedé sin palabras y sin capacidad de reaccionar. Cuando reaccioné ya no pude decirle que parase... fue bastante desagradable. Es cierto lo que dices de la frase del chico. No sé cuánto debe ganar por su trabajo, pero al margen de sus condiciones laborales lo que desprendía eran ganas e ilusión. En España muchas veces justificamos un mal servicio amparándonos en las condiciones laborales del sector hotelero vacacional, por ejemplo, que es cierto que dejan bastante que desear. Pero lo que no tiene sentido es que sea el cliente quien lo pague a base de morros, malas caras y respuestas de escasa cortesía que seguramente todos hemos sufrido en algún momento.
Y es que nos hemos gastado el dinero en cosas, pero seguimos siendo rácanos a la hora de gastarlo en personas, sin acabar de entender que lo importante ya no es QUÉ sino CÓMO.
Un saludo desde Bogotá a los tres!
Creo recordar (si no me equivoco ..) que el año pasado en la 'feria de Fitur' el país ganador ¡ como referente futuro turístico fué 'Colombia' .... y es porque algo está cambiando,algo estan haciendo bien y han encontrado el 'truco' : que no es ni más ni menos QUE DAR SERVICIO ¡
Al final es lo que todos pretendemos que nos ofrezcan cuando hacemos turismo/viajamos ..... una gran mayoría buscamos una relación calidad - precio buena/estandar .... pero siempre recordaremos como 'nos fué prestado ese servicio' .... que es el que luego tendrá 'un peso muy importante' en la balanza a la hora de sentirnos identificados/fidelizados con ese servicio (ya sea país,hotel,restaurante,etc.).
Entre todos,lo estamos avisando : 'O espabilamos O nos espabilan'
Esther .... disfruta de tu estancia y cuéntanos ¡
Buen día a todos compañeros ¡
En españa estamos pasando el "síndrome del nuevo rico". Hemos pasado de ser un país de emigrantes a serlo de inmigrantes. Y eso, al parecer, nos ha convertido en una sociedad un tanto "remilgada" a la hora de mostrar nuestra hospitalidad a quienes nos hacen el cumplido de visitarnos.
Tenéis razón todos en vuestros comentarios. Ester, disfruta de la hospitalidad colombiana y vente con un montón de ejemplos a seguir. Tenemos que aprender de los que aprenden. Un beso.
Gracias Luis y Pere... así es, me han gustado ambas frases porque son verdad: o espabilamos o espabilamos, no hay otra... y especialmente esa de aprender de quienes aprenden... una gran lección!