Buenas,
¿Alguien duda, a estas alturas, de que el turismo y el sector servicios son prácticamente la única salida económica que le queda a Menorca? Ni el Govern ni el Consell han entendido que el desarrollo de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) podía ser un eje económico importante para Menorca, una alternativa fundamental para la creación de empresas conectadas y competitivas. De momento, no estamos ganando la batalla tecnológica.
La industria, el calzado y la bisutería, y también el campo, siguen vivos de forma testimonial pero aportando mucha menos riqueza y empleo que hasta no hace tanto…, otra puerta que se nos está cerrando. Menorca tiene una salida, pero se hace necesario un planteamiento político, económico y social que todavía nadie parece dispuesto a lanzar y liderar.
Primero, de una vez por todas los menorquines debemos convencernos de que el turismo es prácticamente la única salida económica que nos queda. Es una decisión que hemos ido aplazando y dejando en manos de otros: los hoteleros mallorquines, los turoperadores británicos…, ya es hora de asumir nuestra responsabilidad y tomar las riendas de nuestro futuro. Segundo, el Consell Insular debe liderar el proceso de toma de conciencia y construcción de Menorca como producto turístico. Ya es hora… y pronto empezará a ser tarde.
Un modelo agotado
Es evidente que el modelo actual no nos lleva a nada bueno. La conclusión siempre es la misma: muchos turistas pero poco gasto, poca rentabilidad, poca generación de empleo ("Alta ocupación hotelera pero menos rentabilidad en Baleares").
Competir en el segmento sol y playa en base al precio nos lleva a la ruina, es imposible ganarles esa guerra a los resorts del Mediterráneo oriental. Esa espiral nos mantiene en manos de los turoperadores, a los que pagamos mucho dinero (nueve millones de euros) para que programen vuelos cargados de unos turistas cuyo mérito es que llenan los hoteles en verano, pero que eligen en base a precio, gastan poco en la isla, no se sienten para nada interesados en lo que Menorca puede ofrecer, optan por el todo incluido y se vuelven a casa ("Instituciones y empresas fijan el objetivo de atraer 130.000 turistas más a Menorca").
“Es lo que el mercado quiere”, dicen los turoperadores. Sí, es cierto, pero quizá ese mercado no sea el que más nos interese potenciar de cara al futuro.
¿Qué puede ofrecer Menorca?
Y si no competimos en sol y playa, ¿qué podemos ofrecer? Ése es el gran reto. Menorca puede ofrecer lo que es, lo auténtico de su paisaje, de su gastronomía, de su arqueología, de su belleza natural y sus playas…, todo eso que somos y que hace que Menorca cautive al turista que llega con los ojos y el corazón abiertos porque ha elegido realmente Menorca y no un paquete turístico a precio asequible. Debemos buscar ese turista interesado en lo que podemos ofrecer, sea británico, alemán, español, italiano o ruso.
Pero antes, debemos ser capaces de crear un producto turístico basado en eso que somos. Un producto estructurado, de calidad, vendible y por el que valga la pena pagar. La calidad no es cuestión de estrellas, sino de no defraudar expectativas.
Construyamos ese producto turístico basado en lo simple y auténtico, en la tranquilidad, en lo “slow”…, para muchos el lujo es hoy en día el silencio de una playa o un paisaje, el aire limpio, una ensalada con productos frescos, una puesta de sol desde el mar, una excursión en bicicleta o una buena conexión wifi desde cualquier punto…, el Camí de Cavalls puede jugar un papel básico en ese producto, e iniciativas como el cicloturismo (otro buen ejemplo es "Menorca: 3 M € de inversión privada en un proyecto desestacionalizador"), el kayak y el nordic walking también.
Hay que revitalizar la Menorca rural, darle nuevo protagonismo y facilidades, ponerla en el centro de ese producto turístico que debe girar en torno a los valores naturales de la isla. Desoigamos los cantos de sirena, porque en época de crisis siempre llegan los presuntos inversores con grandes proyectos bajo el brazo… y ya tenemos experiencia en ese campo, no dejemos que otros sigan decidiendo por nosotros. Ése es, pienso, el camino. El nuestro no será nunca un producto masivo, con grandes cifras y grandes estadísticas: será un producto proporcionado a lo que Menorca necesita, es y puede ofrecer.
Elijamos el futuro
Necesitamos vernos a nosotros mismo de otro modo, para poder captar luego a quienes estén dispuestos a pagar por compartir todo eso que tenemos y somos. No se trata sólo de vender, sino de convencer, de seducir: primero construir el producto, luego saber promocionarlo y comercializarlo.
Si no nos ponemos a trabajar seguiremos en manos de los hoteleros mallorquines y sus estrategias comerciales, y en manos de los turoperadores internacionales y sus estrategias comerciales, y cautivos del precio y la competencia turca, croata, egipcia, tunecina…, esa espiral puede ayudarnos a sobrevivir, con dificultades, como hasta ahora, pero nunca nos dará la rentabilidad ni nos hará los amos de nuestro futuro.
A mí me parece que no tenemos otra opción. Pero además, esta opción me gusta, no la acepto con resignación y sensación de derrota sino todo lo contrario, porque implica que por fin los menorquines nos decidimos a apostar por el turismo, no por cualquier turismo sino por el que queremos, el que nos valore como somos, que no destruya territorio, que sea sostenible y ecológico, que atraiga a personas con ganas de conocernos y compartir, dispuestas a enamorarse de todo lo que Menorca es y puede ofrecer, a ser nuestros mejores prescriptores, a hablar de nosotros en las redes sociales, en los blogs, en sus reuniones familiares...
El reto de ser capaces de convertir todo eso en un producto turístico estructurado y comercializable es apasionante. ¿Hay alguien ahí dispuesto a empezar ya?
Podría casi copiar tu post y aplicarlo a la isla de Ibiza (salvando las distancias y remarcando las diferencias entre ambas islas, hay que resaltar las “ventajas competitivas”). Totalmente de acuerdo que seguimos jugando a “pan para hoy hambre para mañana”. El otro día me comentaba una amiga que una conocida había ido a Ibiza 4 días en Diciembre y se había vuelto a los dos días porque se “aburría”. No sé si ella se informo poco de qué podía hacer en Ibiza en Diciembre, si realmente es difícil informarse, o si lo que encontró no cumplió sus expectativas… sea como sea me impresiono su comentario. Hay que hacer un cambio, y yo estoy dispuesta a empezar ya!
Núria, esto que cuentas de Ibiza es muy triste, da mucha pena que alguien elija irse de vacaciones a un sitio y se vuelva a los dos días porque se aburre. Está claro que puede pasar, pero que pase debería ser una "anomalía del sistema"... paseando por Menorca tengo la misma sensación. Hay lugares bellísimos también en invierno, como Son Bou, donde está todo cerrado, no se puede ni hacer un pis ni tomarse un café, a pesar de que en Menorca hay turistas del Imserso, por ejemplo... Sólo resisten los fines de semana los valientes del May Tay, Leo y Mercedes... y así en todas las zonas: Cala Galdana es otra belleza en invierno, y todo cerrado... Pero es la pescadilla que se muerde la cola: no vendrá nadie si no hemos construido algo previamente, construir un producto turístico coherente, sencillo y auténtico, para que lo elijan, lo compren y lo recomienden. Ése es el reto, y tanto en Ibiza como en Menorca, tenemos que hacerlo desde abajo!
Gracias por tu comentario!
Cuanta razón tienes Esther, Menorca es un paraíso ¡¡¡. en verano y en invierno ,hay mil cosas para poder hacer ,no sólo tenemos playas y sol .
Si nuestros políticos no se ponen las pilas¡¡ ya!! , esto se va a pique y esuna pena menorca no tendría que estar viva sólo 4 meses del año , Menorca es mucho más que 4 meses...... Que hacemos???
hola estoy totalmente de acuerdo con vosotras servicio, servicio , servicio ,no me canso de decirlo esto es lo que necesita menorca y que todos tengamos claro de lo que vivimos en esta magica y maravillosa isla : menorca. , me ha gustado encontrar este blog , saludos desde alaior
hola estoy totalmente de acuerdo con vosotras servicio, servicio , servicio ,no me canso de decirlo esto es lo que necesita menorca y que todos tengamos claro de lo que vivimos en esta magica y maravillosa isla : menorca. , me ha gustado encontrar este blog , saludos desde alaior
Hola. Estoy de acuerdo totalment con vosotros: Menorca es un pequeño paraíso y tiene todo para pasar vacaciones recreativas. Falta solo un poco, por ejemplo folletos para grupos de destinos (familias, clubs deportivos...)con informaciones más claras y solo escribido en solo una idioma y con las publicaciones de las empresas al final. Además faltan ofertas para vacaciones de reucperación/prevención. Conozco la isla desde ahora más de 20 años y estoy planeando con una agencia de viaje y un/dos complejos turísticos una oferta de viajes de recuperación para familias. Estoy cierta que puede ser un muy bien complemento cuando uniremos las competencias del turismo con competencias en el sector de prevención/rehabilitación (que yo tengo). Eso es una bonita portunidad para mi de un lado devolver algo a los habitantes de Menorca para prestar una aportación de un aumento del contento social y económico y al otro lado a compartir eso tesoro maravelloso (con una naturaleza intacta, aire puro y una atmosfera tan pacifíca) con humanos de cada edad y de cada parte del mundo. Por favor, me deseáis suerte para mis reuniones cuales tendré cuando estaré a Menorca fin de febrero/comienzo de marzo. Saludos cordiales desde Alemania.