Hace un par de semanas, gracias a Luisete , descubrà la existencia de los Resort Fees, unos cargos extra que aplican ciertos Resorts y grandes hoteles en EEUU y el Caribe a sus clientes, y que surgieron como estÃmulo a la demanda por crisis del turismo generada a raiz de los atentados del 11 de Septiembre, según argumentan en este artÃculo del New York times (del 2006!)
Tras investigar en la Web sobre estas tasas, en lineas generales se pueden definir como un cargo adicional y fijo, que oscila entre los 5$-60$, que se cobra a los clientes por el uso y disfrute de ciertos productos o servicios de valor añadido, si bien estos pueden variar ostensiblemente de un Hotel a otro en función de su polÃtica de precios y los servicios disponibles. Véase, a modo de ejemplo, que algunos Resorts incluyen en este cargo el derecho a piscina, gimnasio, internet en la habitación, parking o servicio de lanzadera al aeropuerto.
Los resort Fees, como cualquier polÃtica de precios, tiene ciertas ventajas e inconvenientes sobre los cuales merece la pena reflexionar:
- VENTAJAS:
- Mayor flexibilidad en las tarifas:  Si bien los precios de las habitaciones pueden variar en función de la temporada, desde el punto de vista del Revenue Manager estas prácticas suponen [idealmente] un ejercicio de transparencia en las tarifas que permiten a los clientes decidir el precio final en función de los servicios que desea consumir durante su estancia. Esto es, si un cliente no quiere acceso a internet en su habitación (¿?), parking o gimnasio, ¿por qué cobrarle por unos servicios que no desea? Éste puede decidir pagar solo la habitación y ahorrarse unos dólares en servicios que no va a disfrutar.
- Incremento del RevPAR : Pues al ser un cargo discrecional por parte del hotel, bien utilizado puede suponer un incremento en los ingresos por habitación disponible.
- Gancho comercial : Al tener los precios desglosados, este cargo adicional te permite jugar con los precios de las habitaciones haciéndolos mas competitivos, y cubriendo esa tarifa mas tarde con el cargo adicional. Más aún, es una ventaja competitiva en comparadores y metabuscadores, que solo valoran el precio de la habitación en la comparativa , no asà los cargos adicionales.Â
- INCONVENIENTES:
- Como todo cargo adicional, esta práctica no es del agrado de una gran mayorÃa de clientes, que lo ven como un instrumento opaco para engordar la factura final. Hasta tal punto llega el hartazgo en EEUU, que existen webs para denunciar estas prácticas y ayudar a detectar qué Resorts aplican esta polÃtica, y cuales no. Un ejemplo es Resortsfees.com.
- Todo cargo adicional exige una polÃtica de transparencia en la comunicación a clientes finales e intermediarios que, de no practicarse, acaba la sorpresa en la factura final y el consiguiente rechazo por parte del ya "excliente", reflejado en Webs como Oyster o en la infinidad de Webs de opiniones.
- Dada la coyuntura económica actual, existe una tendencia clara de los turistas a no asumir riesgos en las vacaciones estivales. Esto es, prefieren pagar un precio inicialmente mas elevado y alojarse en un Todo Incluido para evitar este tipo de sorpresas en la factura, y asà disfrutar de la estancia en el Resort con la tranquilidad de que el precio final está cerrado, sea cual sea el tipo o cantidad de servicios disfrutados.
Personalmente, creo que la opción de ofrecer a los clientes varias tarifas en función de sus preferencias, o de los servicios que desean consumir, puede resultar una buena estrategia de precios, pero exige una transparencia en la comunicación muy difÃcil de controlar debido a la cantidad de intermediarios existentes en el sector turÃstico. No será de extrañar por tanto que estas prácticas jueguen a favor del RevPAR, pero en contra de la fidelización del cliente.
¿Qué opináis vosotros?
Fabian como tu, creo que ofrecer al cliente más de una tarifa, que permita adaptarse a clientes con diferente nivel de exigencia en el servicio a recibir, es una buena idea comercial, que exige una gran transparencia en la comunicación, sin embargo no considero que sea difÃcil de controlar, puesto que en ese aspecto en concreto no tienen porque intervenir los muchos intermediarios existentes en el sector turÃstico, si el hotelero es capaz de tener claros objetivos y es capaz de diseñar una estrategia de gestión que le permita alcanzarlos, sin una excesiva dependencia de tales intermediarios.
Lo que esa estrategia necesita, es que el hotelero sea honesto con sus clientes, y no pretende engañarlos con cargos y extras fuera de lugar, y precios en dichos servicios que no estén acordes con la categorÃa del establecimiento y la calidad de los mismos.
Otro requerimiento, es que los precios de cada tarifa, correspondan a servicios perfectamente diferenciados, y no al contenido de las mismas, salvo que dicho contenido este diferenciado en cada una de ellas, servicios de solo alojamiento, alojamiento y desayuno, media pensión y pensión completa no son cuatro tarifas, pero todos ellos, con diferente formato y nivel de su contenido, podrÃan formar parte de tarifas diferentes del mismo establecimiento, por ejemplo en el caso de que ofrezca, como en algunos establecimientos he realizado, tres tarifas diferentes (turista, preferente y ejecutivo) cada uno de esos cuatro servicios, siendo diferentes para cada una de las tarifas, nos ofrecerán 12 ofertas diferenciadas con las tres tarifas.
Si en cada caso anterior a esos cuatro servicios diferenciados les añadimos más atributos, creando forfaits de servicios, sea añadiendo nuevos servicios, o incluyendo más dÃas de estancia, podemos estar ampliando las ofertas diferenciadas dentro de cada una de las tarifas ya definidas, pero no debiéramos definir como tarifas diferentes, lo que solo representa el cobro de diferentes precios, por los mismos servicios.
Pienso que existen muchos equÃvocos en lo que generalmente denominamos como tarifas, cuando solo representan diferentes descuentos sobre una misma tarifa.
Interesante post y planteamiento Fabian. Yo en mi post hablo de enfocarnos hacia la calidad y enfocarnos a clientes que esten dispuestos a pagar un poco mas por una experiencia unica. Los "Resort fees" pueden ser un sistema para cobrar ese extra que los turistas "responsables" (quieren conocer la cultura, naturaleza y costumbres locales) los cuales estan dispuestos a pagar un poco mas y cada dÃa son mas. Esta claro que como bien indicas es vital que el cliente conozca el porque de este coste y en que se utilizará ese dinero extra (trabajos de conservacion, desarrollo local y preservación del patrimonio, entre otros), la trasparencia y la responsabilidad son vitales para que el cliente comprenda y se justifique. Un saludito y nos leemos!
Un abrazo Roy !