La semana pasada National Geographic publicó el ranking de los mejores mercados del mundo. Estos son los elegidos:
1. St. Lawrence, Toronto, Canada
2. Union Square Greenmarket, New York City
3. Castries Market, St. Lucia
4. Ver-o-Peso, Belém, Brazil
5. Mercado Central, Santiago, Chile
6. Kreta Ayer Wet Market, Singapore
7. Kauppatori, Helsinki, Finland
8. La Vucciria, Palermo, Italy
9. Cours Saleya, Nice, France
10. Borough Market, London, England
Al margen de la queja o pataleo que podría señalar por la exclusión de los hermosos mercados españoles de La Boquearía de Barcelona y de San Miguel en Madrid (aunque confieso que el que más me ha gustado en España es el de Santiago de Compostela), si quiero aprovechar el ranking para señalar la importancia que tienen los mercados en la oferta turística de un destino turístico.
El mercado es el punto desde el cual se puede conocer la identidad de un lugar, su gente, sus costumbres y que puede y debe ayudar a la creación de una imagen diferenciada del destino. Los mercados actuan como centros difusores de la cultura local y ayudan al conocimiento de los productos típicos, se pueden aprovechar con fines pedagógicos para dar a conocer la realidad rural y como parte de una experiencia diferenciada.
Un ejemplo de esto es la creación de ofertas diferenciadas por parte de los hoteles hacia sus clientes. Una de ellas puede ser la preparación de platos típicos y posterior degustación de los mismos y esta experiencia debería empezar por la adquisición de productos frescos en el mercado local -cuando no en las propias huertas- para luego llevarlos a su preparación en las aulas de cocina u otro lugar o cocina designado para tal fin.
La gastronomía de un lugar muchas veces presenta una doble lectura en las encuestas de satisfacción de los turistas en los lugares de descanso, de tal forma que para muchos no existe tal gastronomía local, especialmente si se han alojado en un resort todo incluido y no se ha salido del alojamiento, por lo cual la gastronomía local es nula o percibida como inexistente e insatisfactoria, mientras que aquellos que decidieron descubrir la cultura local, pueden describir en qué consiste la gastronomía local, la cual ciertamente existe con sus peculiaridades casi en cualquier parte, otra cosa es que se encuentre satisfactoria, pero eso ya es un tema de gustos.
Es importante en resumen acondicionar los mercados de los destinos turísticos, y adaptarlos a las necesidades de los turistas creando un escenario donde se dramaticen los ingredientes de la cultura y se contribuya, al conocimiento, difusión y consumo de los productos locales.
Ver tour virtual del mercado de Nuestra Señora de África en Tenerife aquí