Imagen : Manfred Max Neef              Â
El turismo, no es ajeno al proceso  tampoco de economÃa desconectada o desvalorizada , desmedida,… que hemos visto desarrollarse en nuestra sociedad. Si todos hacemos un ejercicio de reflexión, uno de los males del sector, viene también por esa vÃa, donde en parte, nos hemos alejado en muchos de los casos del concepto inicial de Turismo, y lo hemos reducido al  de obtención de beneficio a costa de valores, y planteamientos que debieran ponerse en una jerarquÃa superior.
No tenemos que olvidar que el motor de una economÃa o industria, a escala humana, si queremos llamarla citando a mi admirado Max Neefe, tiene que ser la creación de una riqueza diversa, palpable, que revierta en el entorno donde se instala, sostenible, equilibrada, compartida…
El enfoque instalado en el sector, del crecimiento desde hace unos años, del crecimiento per se, del crecimiento obstinado y tozudo, se ha visto que ha compartido los males de cualquier propuesta de economÃa que se basa en un capitalismo desmesurado, y no en una economÃa de mercados inteligentes, a la cual deberÃamos tender, desde mi humilde opinión.
Ya Aristóteles nos advertÃa de la sutil diferencia entre  economÃa, que serÃa el intercambio provechoso entre un ecosistema, con un sistema de valores humanos que sustentan las relaciones de ese sistema, y la crematÃstica, que serÃa la estrategia del dinero, ya no como un medio, sino como un fin. DirÃa que no ha hecho bien, y no ha ayudado a todo ello, la educación empresarial que hemos recibido de :
-        El fin último y principal de la empresa es crear beneficio, y otros postulados similares tan subversivos.
Aún incluso, todo ello ha propiciado que tengamos unos conceptos simbólicos distorsionados respecto al ganar, al crecer, al ser exitosos, … y si no cambiamos un poco esto no lograremos revertir el bucle que se perpetua en el tiempo. A modo de ejemplo, ganar, para muchos de nosotros/as, es un concepto de carácter individual,…¿Curioso?.¿Sorprendido?. Se dice : “ Hemos ganado… " .Pero se piensa en uno o pocos ganadores. Si reduzco este pensamiento, podemos llegar a una conclusión generalista, pero muy sutil e instalada :
-        El beneficio de unos pocos es mas atractivo, seductor,… que la riqueza de la mayorÃa.
A todo ello ha contribuido también la visión elitista ofrecida por los medios generalistas, escuelas de negocios, asociaciones empresariales,…Por un lado con la creación de un modelo simbólico del éxito empresarial, de las competencias necesarias, y de sus fundamentos, que se ha demostrado erróneo y alejado de su esencia, y por otro la  falta de consenso y de un modelo de relaciones humanas entre el propio ecosistema empresarial :
-        Trabajadores, empresarios, territorio, administraciones,…
Claro todo ello ha venido sustentándose en un macrosistema  consumista que se ha servido, a mayor escala, de todos estos falsos principios inculcados y replicados a lo largo y ancho de la sociedad y sus subsistemas.
DirÃa que es hora de despojarnos un poco de todos esos prejuicios, preceptos y conceptos inducidos, y empecemos, de nuevo, a tratar de reconocernos un poco mas, a reconectarnos con la esencia y finalidad de un buen sector e industria, de no tratar incluso la responsabilidad social como un departamento sino como un fiel principio empresarial, de entender que ser sostenibles es ser mas rentables a largo plazo.
De ampliar el concepto y espectro de la riqueza, hacia algo mucho mas intersectorial, mas amplio, menos egocéntrico, y poner la mirada afectuosa, relajada, que disfruta, que acompaña, que posibilita, que amplia posibilidades, que se desarrolla, que se solidariza, que es respetuosa …hacia el bien común.